tag:blogger.com,1999:blog-17550504317697817052024-03-05T22:43:18.695-08:00Fechorías (anti)literariasNuevas ficciones y microficcionesSoledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.comBlogger22125tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-90849541616329462772013-12-05T15:56:00.002-08:002013-12-05T15:56:22.908-08:00Beso justosi tengo que arrancarte con la lengua<br />
las palabras de la boca<br />
espero que valgan<br />
la alegría<br />
de un <i>gritoreclamo</i> que retumbe<br />
hasta la casa de gobiernoSoledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-21041763222336983142013-11-07T17:31:00.001-08:002013-11-07T17:31:02.637-08:00Un cuento para ser feliz<div class="MsoNormal">
Ana llegó esa mañana muy temprano al prostíbulo de las
letras. Pidió por Camila, de quien le habían dado excelentes referencias, y la
escuchó leer un pequeño texto fantástico cuya autora peruana no conocía ni
recordaría el nombre aunque se esforzara. Luego hicieron el amor. Ana nunca
quiso aprender a leer palabras: sigue prefiriendo que la sorprenda la magia de
no adelantar las historias con la traición apurada de los ojos y degustar sorbo
a sorbo la novedad de las no invenciones en ficción. Jamás pudo despojarse de
la voz de Camila, ni siquiera cuando entendió que ella también dormía entre las
líneas de una hoja ajada, dentro de un voluminoso libro del cuarto estante en
ese sitio donde aquella vez gozó. <o:p></o:p></div>
Soledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-31367718811038180852013-11-02T10:31:00.001-07:002013-11-02T10:31:39.846-07:00Toma siete<div class="MsoNormal">
La niña mira por la ventana ilusionada. Ha visto en la tele
como es todo afuera, pero esta es la primera vez que va a vivirlo. El aire, al
que se refieren como tan peligroso, es su más secreta tentación <span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>ama lo prohibido y a los
peces<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>. Los martes, de ahora en
adelante, dormiría hasta las tres, pero los jueves esperaría desde mucho más
temprano el viernes. Cuando su padre llegara a la noche, ella le leería un
cuento y él se dormiría; la niña saldría en puntillas y prepararía caramelo
para decorar la merienda del sábado, con la que despertar a su madre en sus
dominicales cumpleaños. Los lunes, sin embargo, se desperezaría hasta morir,
pero, se sabe, no rencarnaría <span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>ama
lo prohibido y a los peces: el vidrio está roto<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>.<o:p></o:p></div>
Soledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-26299163263541029532013-09-12T11:35:00.002-07:002013-09-12T11:39:52.195-07:00La figura, el fondo o el ojo que se tuerce<div class="MsoNormal">
<i>Arim es omóc ed
edneped odot</i>, leyó en el espejo y no supo establecer un contacto con el
lado opuesto de su elegida realidad, a la que seguía porfiado en llamar destino
optando una vez más por creer en la <i>dadilausac</i>. <o:p></o:p></div>
Soledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-45027501113698284852013-09-09T16:50:00.002-07:002013-09-09T16:50:23.451-07:00Espiración <div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>Necesito
una historia.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>Tomá <span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>respondió y le dio una
cajita de esas que contienen otra cajita y otra y otra, que lo obligaba a
pensar en los cuadros que dentro tienen un cuadro y otro y otro, o en cuando se
enfrentan dos espejos que se reflejan y reflejan y reflejan.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>No
puede ser. Necesito una historia <span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>reconfirmó
él con la mirada cada vez un poquito más triste.<o:p></o:p></div>
<br />
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>Bueno,
tomá <span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>volvió a responder,
molesta y resoplando, y le entregó una manzana mordida.<o:p></o:p></div>
Soledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-81402917409507847422013-09-05T16:55:00.001-07:002013-09-05T16:55:20.487-07:00Obligaciones y buenas costumbres<div class="MsoNormal">
El principio se sitúa en un martes por la mañana. Se
encontraron en la puerta de la iglesia a la que ella solía asistir para
desnudarse: hacía años había descubierto que el problema no estaba en el cuerpo,
sino en la vestimenta. Cuando bajó la escalinata, lo vio sentado en el piso con
la cara cubierta por una boina ajada; dejó caer
la mano sobre su hombro derecho y él se sobresaltó por el calor. Se
encerraron en el mismo altillo en que solían gozar hasta llorar o hasta que el
borde del toallón que ponían en el suelo se prendía fuego. Se sentaron en el
piso, de frente y mirándose a los ojos,
y se prometieron gastar las palabras, las únicas por quienes guardaban la más
estricta fidelidad. Pero se agotaron pronto, tal vez más rápido de lo que esperaban,
secándoseles las gargantas de la erótica caricia que aparece con cada
ocurrencia verbal. Entonces empezaron a morderse. Hasta que además de sin
palabras, se quedaron sin carne. Ya era jueves y esa noche debían cenar con la
familia. <o:p></o:p></div>
Soledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-12572260960183587372013-08-23T16:49:00.001-07:002013-08-23T16:56:40.987-07:00Sexo implícito<div class="MsoNormal">
“El beso que todavía no te mordí, me espera en los bordes de
tus labios”, le dijo ella mientras que, sin que él lo supiera, le hacía el amor
con la mirada. El orgasmo fue intenso; el problema es que todavía no aprendía a
manejar sus fantasías cuando esto sucedió: pocas semanas después abortaría un
embarazo imaginario.<o:p></o:p></div>
Soledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-88996363353756240202013-07-21T16:41:00.001-07:002013-07-21T16:41:35.208-07:00Teletransportación <div class="MsoNormal">
“El clima es como tu pelo”, balbuceaste la tarde de ese
septiembre en que un tornado nos trajo hasta acá a vos, a esta vaca que no da
leche y a mí.<o:p></o:p></div>
Soledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-68151626918177552142013-07-15T15:53:00.000-07:002013-07-15T15:53:07.080-07:00Deber ser<div class="MsoNormal">
Le dijeron que tenía que adelgazar, que debía aumentar el
tamaño de sus pechos, que era necesario que se alisara el rostro tras despertar
y tapara sus cabellos blancos cada veinte períodos iguales de veinticuatro
horas. Que era prudente que siendo mujer midiera unos centímetros más de altura,
por lo que tendría que pararse sobre tacos o plataformas <span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>a elección<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span> y caminar delicadamente
con ellos, sin perder femineidad. Que su rostro no era tan perfecto –argumentaron
que ningún rostro lo era<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>
y que lo mejor era maquillarlo para resaltar determinados rasgos y ocultar lo
que llamaban defectos. Que en algún momento iba a entender la existencia de
palabras solo pronunciables por hombres, pero que había tiempo para eso. Que las
damas tienen un comportamiento al que deben apegarse porque, si se mueven
mucho, se les puede desabrochar el corpiño y provocar al sexo masculino, aunque
también le aclararon que evite la palabra sexo. Que las mujeres deben evadir
cualquier goce individual. Que no es propio que rían a carcajadas. Que no tienen
que bailar como lo sienten, sino como se les impone. Que no se tienten a jugar
a ningún juego que no las posicione en su rol familiar asignado, puesto que
representa un gran peligro para el buen funcionamiento de la sociedad
reproductiva. Que no pueden quejarse, ni luchar, ni organizarse. Que no deben
descuidar a su marido. Que tras procrear <span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>requisito
obligatorio<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span> solo
pueden dedicarse a sus hijas y a sus hijos. Que es mejor que no lean. Que es
mejor que no piensen. Que es mejor que no sueñen. Que es mejor que no sean. <o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Cuando fue grande descubrió que muchas mujeres desaparecían,
como si las hubiera abducido un ovni o tragado la tierra: no le costó descubrir
por qué. <o:p></o:p></div>
<br />
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
Soledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-15024072093556499352013-07-03T17:20:00.000-07:002013-07-03T17:25:16.095-07:00Dicen que sus ojos<div class="MsoNormal">
Seguramente otras personas ya lo habían notado, pero era la
primera vez que yo, a mis casi siete décadas de tránsito por acá, veía algo por
el estilo. <o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Dicen que vivió mucho tiempo en esta cuadra; lo cierto es
que no tengo registro de eso. Para mí, contemplado a la distancia, pudo haberse
tratado del invento de algún personaje aburrido del barrio que se escapó de un
cuento del realismo mágico, incluso mío o del gato gordo que todavía obstruye
cada día a partir de las once de la mañana la luz que podría entrar por la
ventanita de la cocina. <o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
La cuestión es que este hombre, de baja estatura y mucha
edad, dicen, tenía la misma mirada que tuvo cuando era niño. Tenía, sí. No,
por favor no vaya usted a confundirse: no hablo de ningún rasgo fisonómico. Si digo
que <i>tenía</i> la misma mirada que a los
cuatro o cinco años no me refiero a lo que puede devolver un espejo o captar
una cámara fotográfica de la época, sino a su propia capacidad de observar el
mundo. <o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Se hizo público cuando se enamoró y se desilusionó y nunca
más, dicen, se pudo enamorar.<o:p></o:p></div>
Jamás conoció a alguien que pudiera despojarse de sus
adultos prejuicios y entregarse por completo a la lúdica actividad de
disfrutar. Murió solo, dicen, antes de ayer o hace casi una eternidad.<br />
<div class="MsoNormal">
<o:p></o:p></div>
Soledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-86279076900563129862013-06-23T09:47:00.001-07:002013-06-23T09:47:36.120-07:00De puntos de fuga<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>A ese
punto que está allá, fijo, lejos, ¿lo ves? Ahí vamos.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>No lo
veo, no estoy seguro de querer ir.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>¿Por
qué? ¿Porque no lo ves o porque sí lo veo yo?<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>Por
ambas cosas. ¿Cuál sería ese punto? ¿Me lo señalás?<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>Ahí,
justo ahí. Por donde iría una luz de láser si saliera de mi dedo. Igual, no vas
a poder verlo como yo.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>¿Y si
cambiamos de lugar?<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>Es lo
mismo. Tus pupilas seguirán siendo las tuyas y mis pupilas, mías. <o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>¿Por
qué elegiste ese punto?<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>Porque
es lo que quiero…<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>Mirándolo
desde acá.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>No,
mirándolo desde siempre.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>¿Qué
es siempre?<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>Antes.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>¿El
pasado?<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>Todo.
Siempre es todo. Lo que no pasó, todavía no existe, entonces no se cuenta como
siempre. <o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>¿Y
cómo sabés que no te vas a perder?<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>Porque
no dejaré de mirar el punto.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>¿Y si
te distraés?<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>No me
distraería…<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>¿Y si
aparece un obstáculo?<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>Los
obstáculos no existen. <o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>¿Y si
ya estuvieras ahí?<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>¿Ahí,
dónde?<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>En
ese punto fijo.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>¿De
qué punto hablás vos?<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>Mirá,
seguí mi dedo. Como si una luz saliera de él. <o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>Ah,
ese… No me interesa.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>¿Por?<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>Porque
ahí no hay música.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>¿Cómo
sabés?<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>Escuchá…
Siempre estuvimos acá.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>¿Qué
es siempre?<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>Todo.<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>¿Dónde
es acá?<o:p></o:p></div>
<br />
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>Siempre.<o:p></o:p></div>
Soledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-27991990290324017602013-06-18T10:32:00.002-07:002013-06-18T10:32:36.057-07:00Té con limón<div class="MsoNormal">
Los animales comen polenta en el fondo del patio mientras
rasco cáscaras de limón para el té de la tarde. El té de la tarde tendrá como
invitadas a Maribel y Agustina. Agustina llegó por primera vez a esta casa
luego de que el primo Tito cortara con Celeste, la chica de las trenzas rubias;
muchas son las pistas que llevan a suponer encuentros previos a la separación
con la susodicha, aunque no existen pruebas al respecto más que el incipiente
niño con la misma marca de nacimiento que Tito en el brazo izquierdo parido por
Agustina cuatro meses después; la partera jamás confirmó el tiempo de gestación.
La confirmación de asistencia de Maribel nunca llega a tiempo, suele suceder
que dicha notificación arriba incluso después que ella, como si Maribel viniera
a cococho de una liebre y la confirmación viajara en el caparazón de una
tortuga. La tortuga que teníamos en la huerta, que con una naturalidad similar
a la de los más hábiles espantapájaros lograba mantener las frutas y verduras
libres de aves, fue devorada hace treinta y tres días por el perro Juan, ese
que apareció junto a la puerta, en una canasta de mimbre, en septiembre del ´99.
En ese mismo año, la abuela Roberta –de parte de quien el primo Tito recibió
nombre por el ´78<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>
impuso la costumbre de que cada tarde de junio se haría una reunión para tomar
el té con cáscara fresca de limón entre las mujeres que con frecuencia
caminaran por la casa y que los animales comerían polenta del día <span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>aunque ya fría<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span> en el fondo del patio.
Las mujeres que con frecuencia caminaban por la casa llegaron a la casa; la
abuela Roberta las recibió, serví las tazas de té, y noté que esta etapa del
año transcurriría otra vez sin que nadie se preguntara quién era yo. <o:p></o:p></div>
Soledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-857127187747400422013-06-14T16:49:00.000-07:002013-06-14T16:49:14.060-07:00La que ya no tuvo más sombra<div class="MsoNormal">
Después de haber fantaseado <span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>ella
y nadie sabe cuántas más<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>
con todo lo que haría si pudiera ser la mujer invisible diez horas <span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>para qué podrían servirle
once o doce<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>;
cuando al fin probó el jarabe ácido que convirtió en transparente su carne, su
boca y su mirada <span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>por
lógica también su piel y todo lo demás<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>,
únicamente pudo llorar y recordar que nunca pudo aprender a nadar. <o:p></o:p></div>
Soledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-9060897692097958282013-04-27T13:26:00.001-07:002013-04-27T13:26:54.745-07:00Shiohn<br />
<div class="MsoNormal">
Se levantó una ráfaga de viento dispuesta a hacer las
confesiones más dolorosas del otoño, esas que se instalan una vez al año como
las celebraciones transitivas de lo que desde casi todas las perspectivas se
denomina tiempo. De golpe, noventa y siete hojas amarillas volaron con
violencia por sobre mi cabeza, bordeándome el cuerpo cuidadosamente, sin intención
de hacerme cosquillas ni llorar. Una risa se burló de mí a una distancia que
solo podía oírla y, bien dirán por ahí, si no la hubiese oído, jamás habría
existido. ¿O sí? Esa pregunta suele aparecer nada más que con los sonidos,
discriminando a ese sentido de los demás: nadie se anima a poner en duda la existencia
de una persona en los momentos en que nadie la ve, la huele, la lame, la toca.
¿Y si grita? ¿Qué pasaría si en esa soledad en la que está inmersa se anima a
gritar porque nadie la ve, la huele, la lame, la toca? La expresión no llegaría
a destino, pero <span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>decía
la melancólica, porteña y ucraniana poetisa Julia Prilutzky Farny<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span> también podríamos ser el
mismo grito. Aunque ahora no logro recordar si eso era lo que decía ella o lo
que yo interpretaba de lo que decía, lo cual nos lleva al mismo punto de
partida: si nadie la hubiese leído, ¿qué habría sido su poesía? ¿Y la lluvia?
¿Existiría?<o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
Esa tarde en que el otoño, las hojas y las confesiones, aprendí
que todo eso estaba en mí. Porque una monja me pasó por el costado derecho y
observó únicamente mis pies a la distancia que separaba su rostro del piso, con
eso le bastó para despreciarme sin decírmelo ni que yo la escuche. Me senté en
el cordón, acomodé la cara entre mis manos y escupí algunas lágrimas por los
ojos. No sentía vergüenza, sí lástima por un paisaje de ese gris que jamás se
parecerá a la mentira de la mezcla entre un blanco y un negro y sus extremos.
Un tipo se sentó al lado mío y me puso una campera. Sin agradecerle y
respetando el monotemático silencio, le dije mordiéndome los labios que no
había entendido nada. Sé que me interpretó, porque ni bien aparté la tela que
me cubría, me ayudó a soltarme el pelo, aunque para cuando empecé a sentirme
acompañada otra vez, ya otra persona andaba por ahí dudando de mi existencia. <o:p></o:p></div>
<div class="MsoNormal">
<br /></div>
Soledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-87523265739370498302013-04-12T18:57:00.000-07:002013-04-12T18:57:35.212-07:00La cortina celeste<br />
<div class="MsoNormal">
El problema era la arruga en la cortina color celeste. Meses
había pasado padeciendo esa desgracia, sin saber ni sospechar, masticando la
bronca, el asco y la tristeza. Ya no dormía bien de noche, los últimos días ni
siquiera cuando había sol. Con el primer crepúsculo de la semana –que a veces
dudaba si ubicar en domingo o en lunes, así que alternaba- buscaba el
pronóstico del tiempo para saber qué pasaría con el clima, pero rápidamente y
aterrado bajaba hasta el horóscopo a ver qué le depararía el que no nombraba. El
que no nombraba nunca aparecía mencionado gratamente; el horóscopo estaba
ensañado en no decirle cuándo llegaría. Algunas veces se resignaba, otras
estallaba en carcajadas de llanto. El gato siamés -cuyo nombre omitiré por
cuestiones claras- había dejado de perder pelo, hasta que un día pereció y
empezó a aparecerse en sus sueños de despierto escribiendo lo que él hubiese
querido decir con la birome azul y el papel rayado. Cuestión que no podía dejar
de mirarlo, sabía que era imperfecto. Como a todo buen cristiano, esa no
perfección se le hacía insoportable, tenía que disimularla sin demasiado
esfuerzo, como hacen las personas ricas cuando entran a una iglesia. Diecisiete horas pasó visitando a una
terapeuta de piernas largas y escote prominente, aunque con un pequeño defecto
en el brazo, hasta que no pudo aguantar y le pagó extra para que fuera a
tratarlo a su casa: bastó un solo encuentro. Porque cuando él le había dicho, a
la psicóloga y a quienes no lo querían, que su forma de ver el mundo era muy
lineal, no se refería solo a ese punto de fuga del que había partido al pintar
el ventanal en el lienzo pálido, con la cortina color celeste y esa estúpida
arruga que ya no lo dejaba en paz. Y cuando pidió que nadie fuera a pensar que
el que no nombraba era el amor, también estaba siendo sincero. Si algo había aprendido antes
de que le crecieran tanto los pies, era que lo que no se menciona, no duele.
Entonces seguiría en silencio, mientras el felino espichado escribía como
Girondo y él pintaba los cuadros más feos del mundo.<o:p></o:p></div>
Soledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-76920560635889801712012-12-26T10:18:00.001-08:002012-12-26T10:18:50.371-08:00Advertencia al pie<br />
<div class="MsoNormal">
Abrió por séptima vez en la hoja 74. Se juró que sería la
última y se persignó. Repasó con la vista y con el dedo índice las treinta y
dos líneas que separaban la primera palabra <span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>inicio<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span> de la final <span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span>fin<span style="font-family: Symbol; mso-ascii-font-family: Calibri; mso-ascii-theme-font: minor-latin; mso-char-type: symbol; mso-hansi-font-family: Calibri; mso-hansi-theme-font: minor-latin; mso-symbol-font-family: Symbol;">-</span> para luego volver a leer la nota
al pie que advertía sobre posibles consecuencias de amnesia momentánea y
circular. Reincidiría. <o:p></o:p></div>
Soledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-26852384876995226492012-12-04T08:57:00.000-08:002012-12-04T09:07:49.905-08:00Otro acto<br />
<div class="MsoNormal">
<i>Tengo ganas de llorar</i>,
dijo ella sin reparar en que la sala estaba llena de personas con los ojos
abiertos. <i>Esperá a que parpadeen</i>,
pidió él avergonzado. Apretó las pestañas tratando de hacer tiempo, pero el
segundero se había inmovilizado después de la siesta del último domingo. <i>Vámonos de acá</i>, le exigió. <i>Esperá a que empiecen a llorar</i>,
respondió él, y juntos despegaron los pies del suelo.<o:p></o:p></div>
Soledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-77736773701995737462012-10-31T16:03:00.002-07:002012-10-31T16:03:53.117-07:00En definitiva<br />
<div class="MsoNormal">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">-Tomá nota
-dijo manteniendo la mirada
sobre la hoja en la que golpeaban con violenta esperanza las teclas de la vieja
máquina ya entrada en desuso. Luego pensó en lo difícil de anotar el silencio y
con qué palabras podría definirse si existiera la obligación de encontrarle
definiciones a las cosas, incluidas la nada y el vacío, por ejemplo. Inmediatamente
entendió que el ruido tampoco podía ser escrito. Miró el punto que daba por concluido
el último párrafo, le ordenó a su alter ego descansar y fue en busca de la
cámara de fuelle, no sin antes tropezar con el globo terráqueo que había
quedado en la alfombra luego de la limpieza de escritorio efectuada por
Margarita. Decidió que en febrero vacacionaría en Shenzhen.</span><o:p></o:p></div>
Soledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-5606120882842426722012-10-15T10:23:00.000-07:002012-10-15T10:23:57.071-07:00Perro<br />
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify;">
</div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span lang="ES"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Hay
un perro en mi casa. Tiene cuatro extrañas patas y dos orejas que a veces se le
vuelven hacia atrás. Corre y olfatea como si el ambiente le resultara propio y
ajeno al mismo tiempo. El perro en mi casa tiene una pequeña cola parecida a la
de los porcinos, cuestión que me hace sospechar que tal vez no lo sea. Come
todo el día y, si pudiera, comería un poco más. Se pelea con el gato, porque
también hay un gato en mi casa, y hacen las paces lamiéndose en amistosos
lengüetazos. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span lang="ES"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Hay
un perro en mi casa. No sé en qué momento entró, ni por donde, ya que su tamaño
no le permitiría caber por las pocas aperturas que me acercan al exterior.
Quizá nació aquí dentro sin que exista una perra que lo pariera, aunque puede
que sea un germen que fue mutando y creciendo a lo tonto y a lo bobo hasta
encarnarse en un perro, tonto y bobo, en mi casa. Las manchas amarillas en el
piso confirman su existencia para todo aquel que no me cree por no verlo. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%;">
<span lang="ES"><span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Hay
un perro en mi casa. No estoy segura de que sea cierto pero sí de que, en poco
tiempo y a merced de su estrepitoso crecimiento, ya no habrá lugar para la
jaula del canario ni para mí.</span><o:p></o:p></span></div>
<br />
Soledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com5tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-51739925237699616222012-10-08T17:06:00.000-07:002012-10-08T17:06:55.747-07:00Infinitud<br />
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Cuarenta y dos cuerpos inertes, sin contar los que todavía
agonizaban y se enfriaron minutos después. Una mariposa de alas grises pasó
moviéndose con soltura por sobre la sangre aún fresca, cortando el aire. Algo estrujó el corazón del tipo que
corría el ladrillo que acababa de caérsele, el mismo con el que haría una pared
que pertenecería al cuarto del niño que viviría en la casa de la cuadra del
barrio de la ciudad de la provincia del país del continente del planeta de la
galaxia del universo… </span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Los insectos dominarán al ser humano, aunque parezca más viable
la teoría de las medusas. </span><o:p></o:p></div>
Soledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-18708980493314428632012-10-05T20:59:00.000-07:002012-10-05T21:36:15.350-07:00Onomatopeyas<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 18.0pt;">
</div>
<div class="MsoNormal">
<div style="text-align: justify;">
<span style="font-size: large;">El líquido comienza a filtrarse
lentamente por debajo de la puerta. Un arrebato de lucidez te lleva a decidir
poner el trapo de pisos en el siniestro espacio que queda entre la chapa medio
doblada y la madera podrida que recubre el suelo. Volvés al sillón y a la
frazada azul, doblás las piernas, estirás el cuello. Plop. <i>No puede ser</i>, pensás, <i>no hay
por donde</i>, y te acordás del Chavo del ocho. Plop. Te envolvés la frazada en
los hombros y caminás con los pies desnudos por la casa. Vas primero al baño,
creés que puede venir del departamento de arriba. Plop. Se escucha lejos.
Prendés todas las luces que jamás usás, abrís las puertitas del bajomesada.
Plop. Mirás hacia la entrada y ves que el trapo ya está empapado y el agua hace
de las suyas. Te acercás con un balde y lo escurrís, volvés a ponerlo en su lugar. Plop. Creés
haber descubierto la proveniencia. Entrás a la habitación con el balde aún
colgando de la manija en tu codo, como si fuera una canastita. Plop. Sí, estás en
lo cierto, viene de ahí. Abrís las dos puertas del placard de par en par. Plop.
Hay una gotera ahí dentro. E<i>l vecino de
arriba debe tener inundado su departamento,</i> asumís. Agarrás el paraguas y
salís con los pies aún desnudos a tirar piedras a la ventana del de arriba. (Podrías haber subido las escaleras y golpeado la puerta, en realidad). Se
levanta el vidrio y el de pelo largo te grita <i>qué querés </i>de mala manera. Vos le contás un poco nervioso lo que
sucede. El tipo te dice que estás loco y volvés adentro de pésimo humor. Buscás
un pulóver viejo y lo ponés dentro del placard para dejar de escuchar el plop.
Te acostás en el sillón con la frazada y doblás las piernas. Plop. Decidís irte
a tomar algo por ahí. Los plop simultáneos y en sintonía de la lluvia no te
molestan en lo más mínimo. Llegás. Plop. Abrí los ojos, querido, abrilos. ¿Ves?
Plop. No hay ni goteras ni trapo en la puerta. Plop. Andate. Si te quedás mucho
tiempo junto a tu cuerpo puede que ya no te puedas escapar. Plop.</span><o:p></o:p></div>
</div>
<br />Soledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com5tag:blogger.com,1999:blog-1755050431769781705.post-37936802825668268212012-10-05T20:01:00.000-07:002012-10-05T20:01:53.298-07:00Des Cierto<br />
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 18.0pt;">
<span lang="ES" style="font-family: "Bell MT","serif";"><span style="font-size: large;">Él pasa su mano por
la superficie de la arena. Luego la entierra y la retira con un puñado de esa
extraña masa desintegrada en pequeñas partículas que intuye conocer pero, en
verdad, desconoce. Busca en su morral una tela blanca que sabe que no tiene,
aunque con esmero aparece. La coloca sobre su pierna extendida y, encima de
ella, expande lo poco que quedó de arena en la palma de su mano. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 18.0pt;">
<span lang="ES" style="font-family: "Bell MT","serif";"><span style="font-size: large;">Aparece un caracol a
su lado. Lo acerca a su oído y escucha la melodía de <i>Stairway to heaven</i>. El caracol se convierte en un parlante que deja
cuidadosamente, para no derramar la arena, sobre el suelo. Acerca su cara a la
pierna y observa los granos dispersos en la tela. Entonces descubre su misterio:
algo de lo que jamás había leído era tan cierto como la fortaleza con que las
olas rompían en la orilla de la playa en la cual no estaba. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 18.0pt;">
<span lang="ES" style="font-family: "Bell MT","serif";"><span style="font-size: large;">Él pasa su mano por
la superficie de la arena, otra vez. No es un dejá vú y lo sabe, pero no a
ciencia cierta. Ni a ciencia exacta. Tampoco a cierta exacta a quien recuerda
con nostalgia; puede pasarle con suavidad las manos por la cadera aunque ya no
esté. Pero se escama y es una sirena que vuelve al mar y se le escapa, porque
él no sabe nadar. Vuelve en sí y observa los granos de arena en la tela blanca,
se detiene en uno oscuro que entre la multitud no resalta. Intenta agarrarlo con
su pulgar y su índice, mas las dimensiones no lo llevan a buen puerto. Se
acuerda entonces de aquella tarde en que desembarcó en la ciudad vacía, la
misma que se había muerto unos meses atrás, luego de su partida.<o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 18.0pt;">
<span lang="ES" style="font-family: "Bell MT","serif";"><span style="font-size: large;">El pequeño mundo
oscuro, que no puede distinguir entre negro y marrón, queda albergado bajo la
uña de su dedo índice izquierdo. Resuelve que debe ser otro, no el mismo, ya
que es diestro en cuanto a habilidad manual. Comienza a rememorar la lectura de
aquel manual de instrucciones que perdió en una de las tantas mudanzas de
religiones. Muchas noches había pasado peinando a su amada antes de que se
quedara calva, así que piensa en realizarle una peluca con algas al cangrejo
que pasa a su lado. Enseguida sonríe por lo ridícula que le quedaría. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 18.0pt;">
<span lang="ES" style="font-family: "Bell MT","serif";"><span style="font-size: large;">Encuentra en la tela
blanca otra partícula oscura y se pregunta qué la compone y cuál es su ínfima
utilidad en tal inmensidad. Busca cuidadosamente su atado de <i>filipmorris</i> y le saca el celofán para
guardarla dentro. Lo suelda para protegerla y lo archiva. Él vuelve a su casa.
En el camino piensa en lo lejos que está de cualquier playa, de cuando aún
existían las playas, y cuántos como el grano de arena que tiene guardado habrá
pisado al transitar. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 18.0pt;">
<span lang="ES" style="font-family: "Bell MT","serif";"><span style="font-size: large;">Una mano gigante baja
del cielo e intenta sujetarlo entre un índice y un pulgar. Logra esquivarla a
tiempo. Al llegar a su casa y mirarse en el espejo ve que una de sus orejas
parece un caracol y nota que en su mente aún suena Led Zeppelin. <o:p></o:p></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="line-height: 150%; text-align: justify; text-indent: 18.0pt;">
<span lang="ES" style="font-family: "Bell MT","serif";"><span style="font-size: large;">Él pasa su mano por
las cuerdas de la guitarra. </span><o:p></o:p></span></div>
Soledad Arrietahttp://www.blogger.com/profile/03537281703558831635noreply@blogger.com1